Si, soy muy afortunada, lo sé. Porque gracias a que me pude tomar toda la licencia de un tirón después del nacimiento, a que Luca nació en temporada vacacional y a que tengo unos compañeros de trabajo que me bancaron, volví al trabajo cuando Luca y yo llevábamos 5 meses de conocernos, de disfrutarnos, de días donde nos levantábamos cuando gustábamos y nos volvíamos a acostar sin importar que sólo hacía dos horas había comenzado nuestra jornada. Días en que el perfecto relojito de su cuerpo marcaba comienzo y fin de actividades. Esto duró casi casi lo que hoy se está luchando porque todas las mujeres mamás de Argentina y sus bebes puedan tener: seis meses de licencia postnatal.
Debo decir que no sólo soy afortunada por mi licencia y por poder llevar a Luca a mi trabajo, porque no sólo lo llevo si no que está conmigo en la oficina, gracias a que hago un horario de medio tiempo, somos muy poquitos y mi trabajo es muy relajado (es un archivo).
Recuerdo ese viernes, el último de mi licencia, nos fuimos los tres con la practicuna en el auto. Y con una sonrisa, tratando de no despabilar mucho el avispero puse la practicuna en la oficina. Dejé unos chiches, un paquete de pañales y uno de toallitas, y hasta el próximo lunes cuando comenzáramos a trabajar. Nadie dijo nada y yo con mi mejor cara de póker. Nos incorporamos al "mundo laboral" y aquí estamos.
Circular por la ciudad con un bebe es realmente una tarea titánica y eso lo comprendí desde el primer momento en que me tuve que cargar, con "lo necesario": mis cosas, sus cosas, las cosas "por las dudas" y el bebe enfulado. La sensación de estar en una sintonía completamente diferente al mundo era abismal. Nosotros veníamos de estar en nuestra burbuja y de pronto muchedumbre, frenadas, bocinazos, discusiones, horarios. Luca se adaptó sin problema, él seguía a fular y teta, bien cerquita, pegadito, las cosas no eran muy diferentes para él, pero yo si pude sentir el cambio.
Inmediatamente Luca fue conquistando los corazones de la oficina y venían desde otras oficinas a conocerlo.
Finalmente la practicuna quedó, al igual que la cuna acá en casa como archivadora de cosas varias. Luca por elección propia siempre duerme en mi pecho.
Pero a pesar que se lo maravilloso que todo parece (y lo es) también tiene su arista. Porque viajar en bondi es estresante y con un niño lo es más. Y esta semana que Capital fue un horno, sentí que éramos dos pollos al spiedo cocinándonos lentamente. Esta situación me la venía venir, por eso cambiamos nuestro mei tai, de tela de jean, por una bandolera Cerquita Mio hermosa y fresquita (Gracias Bren!!!) pero con los calorazos que hizo no fue suficiente y la verdad que padecimos los viajes.
También hay que mencionar el tema de estar con un bebe, que hoy está a punto de largarse a caminar, en una oficina, digamos que estoy como en alerta constante. Debo decir que Luca es un niño que posibilita el llevarlo y que en la primera de cambio veo que no está bien accionaría para encontrar otra opción. Pero por ahora lo veo fenomenal y yo, me siento feliz de poder seguir estando juntos. Que es agotador, lo es, pero lo elijo porque NOS NECESITAMOS.
En fin, en los días de hoy, conciliar familia y trabajo es un gran desafío. Muchas mujeres deben despegarse de sus niños a poquísimos meses de nacidos y se espera que vuelvan a ser las mismas de antes, enfocadas y PRODUCTIVAS, pero creo que eso es muy poco probable, en el camino algo se sacrifica, porque o estamos en sintonía con el mundo laboral y productivo o estamos maternando piel a piel. Las dos cosas en simultáneo con el mismo nivel de entrega dudo que sea humanamente posible (en mi caso creo que no es necesario aclarar pero igual lo hago: la balanza se inclina totalmente por el maternar, mi cerebro puérpero no es ni de reojo lo que era antes je).
Yo siento que estoy en una realidad paralela, porque sé que la posibilidad que tengo es atípica y así me lo demuestran las caras cuando digo que voy a trabajar con Luca. Tal vez en el futuro deje este trabajo (que no es para nada mi vocación) pero aún le encuentro muchos beneficios con las posibilidades que me brinda (jornada reducida, posibilidad de llevar a mi hijo, y baja demanda intelectual) y no aprovecharlas sería un despropósito, el día en que cambien estas posibilidades, mi rumbo también así lo hará. Y esto está hablado como una decisión de familia, como parte de la crianza de Luca.. Veremos veremos, por ahora, voy tachando en el calendario los días que nos faltan para que llegue febrero y dejemos de sufrir el calor para pasar a disfrutarlo, cuando nos vayamos a la casita que alquilamos en Tandil para nuestras primeras y merecidas vacaciones!!!
Primer día, entretenido con los móviles. Luego la practicuna pasaría a ser una especie de baúl de chices |
Con la marca de la "almohada" (es decir yo) |
Enfuladitos y recién despierto de la siesta matinal |
El oficinista |
Flor me parece genial tu entrada. Resume las dificultades por las que pasamos las mamás con bebés en una ciudad acelerada y en colectivo! y los avatares de tener que volver a trabajar con niños pequeños. Como bien decís, sos una afortunada que trabajás medio tiempo y podés llevar a tu niño al trabajo! qué bueno que pudiste conciliar eso! pero realmente la ley primero debería poner orden (para eso es la ley) en el tema de la conciliación laboral para que luego la sociedad empiece a mirar con otros ojos la conciliación...
ResponderEliminarQue bueno que puedas ir a trabajar con tu niño! Es una buena solución para así poder seguir más tiempo con él.
ResponderEliminarEstá precioso, por cierto. Muy gracioso con su corbatita de oficinista ;)
Besos
Hola, Flor, acabo de conocerte a ti y a tu blog, me has dado una envidia sana increíble. Ojalá a mí también me hubiesen dejado llevar a mi piojo a la ofi. Por cierto, está guapísimo tu nene.
ResponderEliminarsaluditos
Ile, si la verdad es que circular por la ciudad con un bebe es algo que agota. Me olvidé de mencionar a los colectiveros que arrancan apenas pones los pies en el estribo y te obligan a hacer acrobacias para sacar el boleto, acomodarte y sentarte con el crío encima. No fueron pocas las veces que casi me voy al joraca con todo junto. Decí que siempre viaje con fular, mei o bandolera, con eso me siento re segura de que Luca no se me va salir volando de una frenada.
ResponderEliminarY es verdad como vos decís, la ley debería proteger a las madres y los bebes. Yo creo que incluso beneficia hasta los empleadores, respetar los tiempos necesarios para el regreso de las mujeres al ámbito laboral (cuanto más tarde se de el reingreso más posibilidades de "conectar" con el trabajo).
Mercé: si realmente es una suerte!!! También hay mucho esfuerzo, pero vale la pena seguir juntos. La remera de la foto es buenisima jejej lástima que ya no le va, tenía unos 6 meses en ese entonces... ahora esta hecho todo un muchachote jajaja
Besotes a las dos y gracias por comentar bombonas!
Hola Elva!!! Bienvenida!!! Si, lo se, muchas mamás darían lo que fuera por tener una oportunidad así... las entiendo mucho. Recuerdo el momento en que mi licencia por maternidad acabó y me deberia haber integrado, pero yo tenía un as bajo la manga!! Eran mis vacaciones guardadas. Pero darme cuenta que muchas mamás deben dejar a sus bebes en ese momento en que yo prolongué mi tiempo en casa, me puso la piel de gallina. Y llevarlo conmigo, bueno ni hablar... es un beneficio único!
ResponderEliminarbesitos y gracias por pasar!
flor
La verdad que no debe ser sencillo, pero dadas las circunstancias de hoy en dia, sos muy afortunada de poder tenerlo con vos y poder seguir laburando! Y ahora que se esta largando a caminar vas a tener que ingeniartelas para que no se escape eso si! jajaa! Me alegro que la Bandolera les haya servido preciosa :) No me subiste fotito! MAl ahi! jajaa! Aunque si, con el calor que hizo esta semana que paso una no se aguanta ni la piel! Y los piojos pobrecitos sufren muchisimo! :( Un besote gigate a los 2♥
ResponderEliminarEs genial, cuanto me alegro de que puedas compaginar tu trabajo de esa manera, qué bien que no te hayan puesto pegas.
ResponderEliminarSeguid disfrutando de estos momentos.
Qué grande está ya!
Un abrazo
No es fácil viajar en bondi con un bebote, un bolso, las monedas, el colectivero que frena mientras estas parada tratando de mantener el equilibrio, uno que te mira mal porque tiene que "cederte" su asiento... pero me encanta que puedas conciliar de alguna manera tu trabajo con tu maternidad... Un aplauso para tu jefe, ojala se contagien muchos mas!
ResponderEliminarBesitos a los dos!
ay gorda. yo no se si podria! me superaria la situacion y renunciaria directamente... te felicito por la lucha diaria y a LUCA TAMBIEN!
ResponderEliminarque lindo que se vayan a tandil otra vez!!!!!!
que ganas de irme de vacacionessssssssssssssssssssssss...
Flor, esa oportunidad no la tienen todas y eso se agradece. Ojalá Luca pueda recordar estos momentos que vive junto a ti.. bueno, y si no tiene las fotos, jeje.
ResponderEliminarSaludos.
Si chicas, es una situación lamentablemente atípica, de la cual estoy total y absolutamente agradecida, y la cual también requiere de mi mucha energía y mucho cuerpo, por eso los días que estoy agotada (o las noches en que pienso que al otro día es laboral) me enfoco en pensar que tengo la posibilidad de estar juntos, de no tener que dejarlo (y encima para hacer algo que no me va ni me viene) y eso me da fuerzas para tomarme el día de a uno por vez.
ResponderEliminarGracias a todas por pasar!!!
Besos muchos!
P.D: siii Pao, Tandil otra vez :D serán las vacaciones más sencillas del mundo, pero no sabés cómo las estoy deseando, cómo si me fuera de a un zafari al lugar más exótico de la tierra!!! Estoy con muchas ganas, se que todos lo vamos a disfrutar y a descansar.... ya falta cada vez menos ;)
Sólo puedo dare las gracias por compartirnos tu experiencia de vida.
ResponderEliminarEres muy afortunada de tener posibilidad de conciliar trabajo y maternidad, aunque de momento no labores en algo de tu entera satisfacción.
Te mando un abrazo bien grande!
Gracias a vos Edna por pasar por aquí!!! Eres siempre bienvenida :)
ResponderEliminarCreo que algún día llegará ese momento de hacer lo que me guste :)
Besotes!!!
Que suerte que tenes con el tema de la licencia. Yo soy de Argentina y vivo en USA, aca la licencia no existe! es una verguenza, te dan 6 semanas (NO PAGAS) solo para mantenerte el trabajo, si queres mas tenes que arreglarlo con la compania (tienen que ser buena onda) pero si te dicen que no, tenes que volver a las 6 semanas o podes perder el trabajo.
ResponderEliminarMuchas madres no pueden darse el lujo de estar sin trabajar y tienen que volver al toque por que no les queda otra despues de 1 mes y medio sin sueldo. Es una desastre!
Mami: uyyyyy si que es un desastre!!! Cuánto lamento que las mujeres y los niños tan pequeños tengan que vivir una separación así de temprana, así de violenta y desconsiderada.
ResponderEliminarOjalá las cosas se modifiquen pronto, simplemente no es justo, no es humano.
Besos y gracias por pasarte, te espero cuando gustes!
Flor